El cambio climático es uno de los problemas más importantes a los que se enfrenta la humanidad. Se calcula que el sector HVAC contribuye en un 15% a las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo.
Hay efecto colateral producto del cambio climático: a medida que el clima se vuelve cada vez más extremo, las tecnologías HVACR se convierten en un bien de primera necesidad para diferentes sectores de la población. Luego, la demanda de confort incrementa la demanda de energía y, en consecuencia, la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) a la atmósfera.
RefriAmérica y Carrier reconocemos el potencial de la innovación inteligente y sostenible, por lo que se compromete a establecer objetivos de emisiones basados en la ciencia y alineados con los objetivos del Acuerdo de París.
Pero es importante estudiar de qué manera está afectando el uso del aire acondicionado al medioambiente y las innovaciones que estamos aplicando para reducir su impacto.
¿Qué es la huella de carbono?
La “Huella de Carbono” se denomina a un indicador ambiental que pretende reflejar la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de una persona, una empresa, un evento, una máquina o un producto.
Para cada persona, la huella de carbono es la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero que produce al fabricar o consumir un producto o simplemente al realizar sus actividades diarias. Se acostumbra expresarse en toneladas de CO2 emitidas.
La huella de carbono que dejamos al planeta depende de los hábitos en cuanto a consumo de energía en todas las actividades que realizamos:
- En el hogar (electrodomésticos, iluminación, computadora, celular, y por supuesto, aire acondicionado)
- En el transporte (consumo de combustible del automóvil, motocicleta, del bus; cuántos km y veces que nos transportamos diariamente).
- En los hábitos de consumo y residuos (consumo de alimentos ecológicos, de producción nacional o importada, si nos interesa el envase, si reciclaje, generación de basura orgánica e inorgánica, almacenamiento de residuos, etc.).
En el caso quienes nos dedicamos a la sector de climatización, además de lo anteriormente manifestado, tenemos una mayor responsabilidad. Nuestra meta es crear sistemas cada vez más eficientes y menos contaminantes.
En el sector, una toma de decisión errónea puede tener consecuencias catastróficas para el medioambiente:
- Cuando no realizas mantenimiento de los equipos
- Cuando el mantenimiento no se hace de forma adecuada, según los manuales del fabricante
- Cuando se realiza un mal cálculo y sub/sobre dimensionamos equipos
- Cuando no usas las herramientas/instrumentos, ni los controles adecuados
- Cuando no escoges el refrigerante con bajo PCA o GWP
- Cuando no seleccionas un equipo eficiente
Por ello es importante contar con un experto como los nuestros, para que pueda asesorarte en la forma más eficaz de crear un proyecto sostenible.
¿Qué es el Potencial de calentamiento atmosférico?
El Potencial de Calentamiento Atmosférico (PCA) es una medida relativa del efecto de calentamiento que produce un gas cuando está en la atmósfera. En inglés: Global Warming Potential (GWP).
El PCA indica la cantidad de calor atrapado por una tonelada de un gas que se ha escapado hacia la atmósfera en relación con la cantidad de calor atrapado por una tonelada de CO2 en la atmósfera durante un determinado período de tiempo.
Se eligió el CO2 como gas de referencia, dándole como 1 el valor de su PCA. El PCA de la mayoría de los HCFC y los HFC supera en miles de veces el del CO2. Por ejemplo, el HFC-134a o refrigerante R-134a tiene un PCA de 1430.
Esto significa que la emisión de 1 tonelada de gas refrigerante HFC-134a hacia la atmósfera contribuiría al calentamiento global lo mismo que la emisión de 1430 toneladas de CO2 emitidos hacia la atmósfera.
Para las mezclas el PCA se calcula por el promedio ponderado de sus componentes. Puedes explorar cómo es su medición en este artículo.
Condiciones de almacenamiento y trabajo de los refrigerantes
Estamos acostumbrados a usar principalmente el hielo como refrigerante que se derrite y su “residuo”, que es el agua líquida, no es problema. Sucede lo mismo cuando se calienta. En ambos casos puede estar en contacto con el medio ambiente e inclusive se pueden re-usar.
De igual forma, usamos el aire como refrigerante que luego de cumplir su función de refrigerar “se calienta” y tampoco hay problema. Se puede re-usar.
Pero los fluidos refrigerantes que se utilizan en los equipos de aire acondicionado se han fabricado para estar confinados toda su vida en cualquiera de las dos situaciones:
- Estar confinados dentro de recipientes metálicos como “líquidos comprimidos”.
- Estar en circulación o quietos dentro del circuito de una máquina o equipo de refrigeración o de acondicionamiento de aire.
Puede ser equipo de aplicación doméstica, comercial o industrial pero la carga de refrigerante pequeña, mediana o grande que le corresponde en cada caso debe permanecer siempre dentro de sus respectivos circuitos, sea cual fuera el refrigerante que se esté usando.
Efectos directos e indirectos
Hay que tomar muy en cuenta que para un sistema aire acondicionado, tiene que cumplir dos funciones importantes:
- Conservar los alimentos o brindar comodidad (confort) a las personas.
- No producir o producir muy pocos cambios o daños al medio ambiente.
La primera función no necesita mayor, para ello se inventaron los equipos. Pero la segunda función no hay que olvidarla, y se ha vuelto una de las misiones más importantes.
Los daños se pueden producir por calentamiento global directo y calentamiento global indirecto. A la suma de ambos efectos lo denominan: Impacto Total Equivalente de Calentamiento o por sus siglas en inglés TEWI (Total Equivalent Warming Impact)
Sabiendo esos efectos estamos obligados a:
- Usar la menor carga de refrigerante posible.
- Utilizar las buenas prácticas en las instalaciones para evitar y/o minimizar las fugas de refrigerante(alarmas).
- Utilizar refrigerantes con nulo o bajísimo PCA o GWP
- Utilizar equipos eficientes para consumir menos energía eléctrica proveniente de centrales que generan electricidad usando combustibles fósiles.
- Buscar, en lo posible, conectarnos a centrales de generación de energía eléctrica que usen fuentes de energía renovable.
Ante la realidad cada vez más frecuente de catástrofes naturales como consecuencia directa del cambio climático, la industria HVACR deberá innovar y redoblar esfuerzos para desarrollar tecnología de punta que privilegie la eficiencia energética y el consumo sustentable, a fin de reducir su huella de carbono e impacto en el medioambiente.