El 8 de marzo se celebra el día internacional de la mujer, fecha que trae la consigna de acceso al trabajo y derechos en condiciones de igualdad.
No obstante, aún se asume la correspondencia de ciertas labores con el género, por lo que en muchas industrias las mujeres todavía se deben ganar su espacio a pulso.
Las trabajadoras, en cifras
El Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2021, publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), indicó que la tasa de desocupación en las mujeres pasó del 9,3% en 2019 al 11,9% en 2020, con un aumento del 2,6%. Mientras que los hombres experimentaron un aumento de 2,5% para el mismo periodo.
Si bien son cifras similares, las mujeres se siguen ubicando 4 puntos porcentuales por encima, lo que se traduce en un índice generalizado más alto de desempleo tanto formal como informal.
Ahora bien, ONU mujeres, en su publicación El progreso en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible panorama de género 2021, aclara que la pandemia reforzó las desigualdades de género en el hogar y en el mercado laboral.
En ese sentido, apunta que “el número de mujeres ocupadas disminuyó en 54 millones, mientras que 45 millones abandonaron la fuerza laboral por completo”, siendo pérdidas de empleo más marcadas en comparación con los hombres durante el mismo tiempo.
Adicionalmente, menciona que las brechas de género existentes en la investigación “pueden reflejar en parte la menor presencia de mujeres en la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, donde solo algo más de la tercera parte de los graduados son mujeres”.
Según la CEPAL si bien la participación laboral femenina en la región de Latinoamérica había crecido constantemente hasta 2019, esta era significativamente inferior a la de los hombres y aún persistían diferencias notables en lo referente a la calidad de su inserción laboral, pues presentaban mayores niveles de desempleo e informalidad, salarios menores por ejercer las mismas labores y acceso escaso a puestos jerárquicos.
De los datos presentados se puede concluir que, si bien se presentaron avances que le permitieron a las mujeres desempeñarse en roles diversos, la pandemia contribuyó a una desaceleración y reversa de este cambio.
Por eso en RefriAmérica hemos querido exaltar el rol de la mujer en la industria de la Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado (HVAC), un espacio de trabajo y desarrollo tecnológico que ha tenido una tradición más masculina, pero donde muchas mujeres han puesto su contribución laboral y académica en pro de las soluciones de climatización y de confort humano.
Onyxs Strober, gerente de los canales de venta de VRF para Latinoamérica y el Caribe – Carrier
En 2003 inicia su trabajo en la industria del HVAC como coordinadora de técnicos. Esta gerente se describe como una enamorada de lo que hace y asegura que llegar a su cargo actual es uno de sus más grandes logros, porque nunca imaginó liderar un departamento con alcance a nivel internacional, donde pudiera ganar la confianza de tanta gente.
Los retos de las mujeres en el sector HVAC
Para Onyxs, ser mujer y trabajar en la industria de la climatización sigue siento un reto en dos sentidos. “El primero, por exigir el respeto en el área laboral; estoy segura de que podemos hacer un excelente trabajo y demostrar nuestras capacidades. El segundo es ganar el reconocimiento y el espacio para dedicar a nuestras responsabilidades familiares, tal como el cuidado de los hijos, el cual no va en detrimento de la dedicación al trabajo, actuar de forma profesional o llegar a las metas”, aclara Strober.
¿Varía según el sector en el que trabajes? Según la gerente de Carrier, sí. “Si bien depende mucho de los mercados y dónde estés ubicada, el que encuentres mayor o menor resistencia para poder ocupar posiciones importantes dentro de la industria, afortunadamente en Latinoamérica hemos aprendido y cada vez es más claro que podemos ocupar puestos importantes, independiente de nuestro género” comentó.
Fuente: ARC Latinoamérica | Autor: Iris Montoya